Publicado por David Arbizu
UNA NUEVA ÉPOCA: EL ANTROPOCENO
A nivel geológico, los científicos han divido la historia de
la Tierra en unidades geocronológicas que forman una escala temporal y señalan
procesos y cambios significativos que han afectado a la biosfera, a la
supervivencia y adaptación de las formas de vida del planeta e incluso a
reestructuraciones de grandes masas de tierra, que ahora conocemos como
continentes y, consecuentemente, también a reestructuraciones de toda la masa
acuática que las rodea. Dependiendo de la magnitud de los procesos y cambios en
el planeta y su biosfera, encontramos diversas divisiones y subdivisiones. De
este modo, actualmente nos encontramos en la época del Holoceno, que está
dentro del período Cuaternario, el cual pertenece a la era del Cenozoico.
Durante los últimos 11.700 años, la época del Holoceno, el
clima se ha mantenido notablemente estable, algo que ha permitido que el ser
humano desarrolle el mundo que ahora conocemos, con las ciudades, las
sociedades, los medios de transporte, las redes de comunicación, las formas de
generar energía, la agricultura, las diversas formas de ganadería y explotación
de los animales y, sobre todo, la industrialización y explotación de los
recursos del planeta.
Hace unos tres años empezó un debate científico a partir de
una propuesta que se podría formular con esta pregunta: ¿Llegó la hora de dar
por terminada la época actual, conocida como Holoceno, que se inició hace unos
11.700 años y comenzar a llamar al período en que vivimos, definido por la
impronta del hombre sobre el planeta, con un nombre nuevo?
Está claro que el planeta ya no mantiene esa estabilidad
característica del Holoceno y que existe un desequilibrio en todos los sistemas
y patrones, desde los geológicos hasta los que tienen una relación directa con
el clima y la biosfera, generado y potenciado por el gran aumento de la
población humana y un sistema instaurado abusivo y destructivo, tanto a nivel
político como económico y social, algo que se refleja sobre el planeta como una
explotación extremadamente excesiva e irracional de sus recursos.
A finales de agosto se celebró el Congreso Internacional de
Geología en Sudáfrica y la mayoría de los científicos llegaron a la conclusión
de que estamos en una nueva época cuyo nombre más adecuado es el Antropoceno,
que podríamos definir como la “Edad de los Humanos”, una nueva época que da por
terminado el Holoceno. Entonces aparece otra pregunta: ¿Cuándo empezó el
Antropoceno? Algunos científicos consideran que empezó con la Revolución
Industrial, que se inició a mediados del siglo XVIII en Inglaterra y luego se
fue extendiendo. Otros proponen que empezó con la aparición de los isótopos radiactivos
producto de las bombas atómicas que se utilizaron entre 1940 y 1950, ya que, para
realizar sus mediciones, los geólogos tienen que encontrar una “evidencia
estratigráfica”, una señal inequívoca global y sincrónica, una huella en las
capas que forman la superficie de la Tierra, tanto en las rocas como en el
hielo, algo que no cumple la Revolución Industrial porque su huella no llega
por igual y al mismo tiempo a todo el planeta.
En lo que están todos de acuerdo es que el inicio del
Antropoceno debe reflejar el momento en que la actividad humana empieza a
impactar sobre todo el planeta causando el cambio climático con el
calentamiento global, el gran desajuste de los sistemas atmosféricos, oceánicos
e incluso tectónicos y, consecuentemente, la pérdida acelerada de la
biodiversidad con la destrucción de hábitats y ecosistemas y la extinción de un
gran número de especies de animales y plantas que nos hace encarar lo que muchos ya consideran la sexta extinción masiva en la historia del planeta
Tierra. En este sentido, la “evidencia estratigráfica” correspondería a las
improntas dejadas a partir de mediados del siglo pasado, ya que es cuando se
encontrarían nuevos materiales, como el aluminio y los plásticos; cuando
aumentan los residuos de la quema de combustibles fósiles, del uso de
plaguicidas y fertilizantes; cuando empieza la acidificación de los océanos; cuando
aumentan las marcas fruto de la deforestación y quema de espacios naturales;
cuando se encontrarían los isótopos radiactivos antes mencionados y marcas
reflejando el inicio de extinciones masivas de seres vivos, así como sus migraciones
forzadas por el cambio climático y la pérdida de sus hábitats debido a la
explotación y expansión del ser humano sobre la superficie del planeta.
En cualquier caso, el término Antropoceno y todo lo que
significa todavía no se va a aplicar formalmente, ya que tiene que ser
ratificado por varios organismos, algo que tardará algunos años en realizarse y
que para hacerlo requerirá, lógicamente, la referencia científica que señale
cuándo comenzó la nueva época. Así que, de momento, no está claro cuál va a ser la "evidencia estratigráfica" que señale el inicio del Antropoceno, lo que sí que se ve con claridad es todo el efecto negativo y desequilibrante del ser humano sobre el planeta, así que, sea cual sea, no será una evidencia estratigráfica de la cual sentirnos orgullosos.
Fuentes:
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