domingo, 19 de diciembre de 2021

LA PANDEMIA DEL COVID-19 COMO RESULTADO DEL BAJO NIVEL DE CONCIENCIA DEL SER HUMANO

Redactado y publicado por David Arbizu


Sin entrar ahora en teorías sobre el origen del Covid-19, lo que nos muestra esta pandemia es nuestra fragilidad y toda la amenaza que el ser humano representa para la vida en el planeta, empezando por su propia vida. La pandemia empezó a finales de 2019, con los primeros infectados identificados en Wuhan, en China. La Organización Mundial de la Salud la declaró una emergencia de salud pública de importancia internacional el 30 de enero de 2020 y la reconoció como una pandemia el 11 de marzo de 2020, cuando informó que había 4.291 muertos y 118.000 casos en 114 países. Creo que todos hemos sido conscientes, especialmente durante el confinamiento, de cómo se expandía la pandemia a nivel global y aumentaba el número de contagios y muertes por todo el mundo.



Con el paso del tiempo se han ido originando varias olas de infección, así como mutaciones que ha ido haciendo el virus, pasando por variantes más mortales y quizás menos infecciosas y también por variantes menos mortales pero con mucho poder de infección y expansión. Ahora nos enfrentamos a la sexta ola, con la variante Ómicron mientras sigue infectando la variante Delta, que en principio parece más mortal que la Ómicron, aunque los efectos menos impactantes del virus ya empiezan a tener relación con las vacunaciones realizadas, que detienen infecciones y que, especialmente si hay infección, esta se pueda desarrollar hacia estados muy peligrosos para la salud e incluso hacia la muerte.

Después de su inicio en Wuhan y su rápida expansión, empezaron las variantes y las señales que indicaban una relación directa entre lugares con baja implementación de medidas de protección y bajos índices de vacunación con el surgimiento de nuevas mutaciones y puntos de inicio de esas nuevas variantes. Las variantes se producen cuando se van acumulando mutaciones que llevan a que el código genético del virus se aleje cada vez más respecto al virus inicial. La primera variante desde que empezó la pandemia fue la Alpha, encontrada en el Reino Unido hace un año, y que al poco tiempo se convirtió en la dominante. Luego aparecieron la Gamma, registrada en Brasil, y la Delta en India, que es la que se ha establecido como dominante en gran parte del mundo hasta la actualidad.

Cuando apareció la variante Alpha en el Reino Unido, en Europa aún no había empezado la vacunación. Cuando los casos empezaron a subir, apenas había arrancado la campaña de inmunización, centrada primero en vacunar a las personas más vulnerables y a ancianos, lo que se tradujo en una virulenta ola en gran parte del continente. Con la variante Delta ocurrió algo similar: surgió en India entre abril y mayo, en uno de los países más poblados del mundo que sufrió duramente a causa del Covid-19. Y lo hizo cuando apenas un 3% de su población estaba completamente vacunada.
En Brasil, cuando se detectó la variante Gamma, poco más del 2% de la población tenía la pauta completa a finales de marzo, cuando se llegaron a registrar 3.000 muertes diarias. Desde entonces, la tasa de inmunización aumentó y ahora ronda el 65%, gracias en gran parte a un robusto sistema de atención primaria.

Por todo esto las autoridades sanitarias de todo el mundo hacen hincapié en la necesidad de la vacunación, ya que, según aseguran, cuantas menos personas vacunadas, más se seguirá transmitiendo el virus, más variantes aparecerán y más lejos se estará de acabar con la pandemia. Además, está comprobado que se trata de un virus con un nivel de inteligencia que significa que hace mutaciones buscando la forma de existir y multiplicarse sin llegar a una virulencia extrema, o mortalidad, porque eso le dejaría sin huéspedes ni posibilidad de expandirse.

La variante Ómicron, como la Beta, ha empezado en Sudáfrica, una zona con muy poca vacunación, ya que actualmente solo el 7% del continente africano está inmunizado, y en el caso de Sudáfrica poco más del 25% de la población está vacunada. África muestra muchas cosas a tener en cuenta tanto directamente con este virus como con las condiciones de pobreza que dominan en general en el continente y todo el abandono que recibe por parte de los otros continentes y países, que solo se fijan en ella para hacer negocio. Aparte de ese abandono, en muchos lugares especialmente de África hay mucha negación a recibir fármacos o tratamientos y también muchos países cuentan con reglas y normas que dificultan la autorización de algunas vacunas. Y junto a todo esto se suman las condiciones que algunas vacunas requieren para que no se estropeen, normalmente a nivel de refrigeración, y muchos países no tienen instalaciones adecuadas para tenerlas y utilizarlas.



Así que el Covid-19 nos muestra muchas más cosas que no solo el hecho de ser una pandemia. Nos muestra cómo hemos tratado y seguimos tratando el planeta, y que todo ello va generando situaciones que facilitan la expansión de enfermedades. Nos muestra que la deforestación y la invasión y destrucción de los espacios naturales nos va a costar un precio que puede ser mucho mayor que la devastación producida por un incendio o la entrada en zonas habitadas de jabalíes u osos, porque sea cual sea el origen del Covid-19 lo que sí nos muestra es el aumento de posibilidades de enfermedades zoonóticas, y que si hasta ahora las variantes de la gripe aviar y la gripe porcina en muy pocas ocasiones infectan al ser humano, en cualquier momento esto puede cambiar y originarse una enfermedad incluso peor que el Covid-19. Nos muestra cómo nos tratamos entre nosotros como humanos, cómo el nivel de atención sanitaria de cada país responde frente a la pandemia, cómo incluso en países ricos, especialmente en Estados Unidos, han tenido más acceso a las vacunas personas con poder adquisitivo llegando desde otros países de Centroamérica y Sudamérica que personas de barrios pobres y marginados, donde además existen problemas raciales al ser barrios donde la mayoría son personas negras o de otras partes de América. También nos muestra el despotismo y falsedad de muchos gobernantes, como Bolsonaro en Brasil y Trump en Estados Unidos. Nos muestra cómo toda la contaminación que nos rodea, desde nuestras ciudades y entornos hasta nuestra alimentación y forma de vida, debilita nuestros sistemas y nos enferma dejándonos más indefensos frente a cualquier ataque vírico o bacteriológico que al mismo tiempo potenciamos con nuestra contaminación y abuso. Nos muestra cómo el ser humano sigue solo pensando en su bienestar y el equilibrio climático de la zona donde reside, sin valorar la expansión de la pandemia en países pobres como India, sin valorar las dificultades de vacunación en África, y cómo las vacunas se distribuyen siguiendo el rango que marca la riqueza, con laboratorios que ya empezaron sus estudios y elaboración teniendo de antemano contratos con países ricos e igualmente iniciándose disputas entre todos por el mayor o menor acceso a las vacunas conforme fueran siendo fabricadas. También nos muestra el egoísmo del ser humano que sigue aprovechando cada momento de apertura de permisos para viajar o hacer cualquier tipo de actividad lúdica sin tener en cuenta todo el perjuicio que provoca sobre la crisis planetaria y obviamente como forma de facilitar y expandir infecciones.

Por lo tanto, ahora las variantes surgen principalmente de países maltratados y abusados. No hay que olvidar que Sudáfrica ha sido un apartheid durante muchos años, con una minoría blanca racista dominante. De igual modo, África en general representa ese abuso del ser humano devastador pasando por encima de la naturaleza, de todos los seres vivos y del prójimo, y una gran parte de la población está muy castigada por hambrunas, guerras, enormes deforestaciones y contaminaciones de minas y extracciones petrolíferas, y a todo ello se añade el surgimiento de enfermedades como el Ébola y especialmente el Sida, que se suman a unas condiciones que han tirado abajo el sistema inmunitario de sus habitantes. Así que es un caldo de cultivo para nuevas mutaciones del Covid-19 y de algún modo es la respuesta a todo el abuso recibido y que sigue habiendo. 

Todo ello forma parte de la condición humana, del nivel de conciencia actual de la humanidad. La ley del libre albedrío nos conduce a las polarizaciones cuando no hay mayor cociente de luz espiritual, y las polarizaciones son aprovechadas por los dos lados sin la conciencia adecuada, potenciando y acelerando resistencias y movimientos que alejan de la inmunidad colectiva y favorecen el desarrollo de teorías conspiranoicas y de falsedades sobre las que siempre alguien va a estar haciendo negocio mientras engaña a parte de la masa. Si realmente hubiera una conciencia de unidad, de amor y hermandad en el planeta, el sujeto de la imagen inferior que está infectado no tendría ningún poder sobre los demás y el virus moriría junto con ese mismo sujeto que no está en la frecuencia del colectivo, pero hay muchos intereses para que esa persona infectada exista, para que se mantengan las polarizaciones y los conflictos, y no hay el despertar espiritual necesario. Y todo esto nos lo muestra la pandemia y cada ola que va llegando.

Las últimas noticias nos hablan de una expansión cada vez mayor de la sexta ola, de la variante Ómicron. También llegan estudios que confirman que la tercera dosis funciona y que cada vez hay más hospitalizaciones de personas mayores de 60 años que todavía no se han puesto la tercera dosis. Ya se sabe que el refuerzo reduce hasta 9 veces el riesgo de enfermar de gravedad y también que se va perdiendo la capacidad protectora de las vacunas puestas hace meses, por eso hay un gran interés en acelerar la vacunación de la tercera dosis. Tal como muestra la imagen superior, otro estudio recientemente publicado sobre la variante Ómicron detalla que crece 70 veces más rápido que la variante Delta en el tejido bronquial, en los conductos principales que van desde la tráquea hasta los pulmones, aunque una vez afectados los pulmones su crecimiento es más lento, pero todo ello siempre va a depender del estado de salud del sistema inmunológico de cada persona. Pero esta capacidad de réplica en la zona bronquial puede favorecer que las personas contagiadas infecten a otras con más facilidad. También se ha señalado que un virus muy infeccioso, aunque sea menos patógeno, puede llegar a causar una enfermedad más grave y la muerte.


Es necesaria una inmunización colectiva, pero mientras no haya más apoyo de los países ricos a los pobres va a ser muy difícil. Aunque algunos países o agrupaciones como la Unión Europea han hecho donaciones de millones de dosis, muchos más millones de los donados han quedado pendientes de distribución e incluso se han perdido por llegar a la fecha de caducidad, porque las donaciones nunca son verdaderas y siempre conllevan acuerdos bilaterales y compromisos relacionados con la obtención de beneficios económicos.


Ese nivel evolutivo de la humanidad tendrá un sistema inmunológico fuerte, no sucumbirá ante estos virus pero tampoco facilitará que surjan por su falta de conciencia. La estabilidad y equilibrio del planeta con una humanidad más evolucionada, con mayor conciencia y como especie líder en comunicación directa con Gaia conlleva otro estadio evolutivo de la humanidad y planetario donde no cabe la devastación, ni la crisis planetaria, ni la sexta extinción masiva, sino el avance e implantación del estadio 2 de desarrollo planetario en el camino y proceso hacia la Tierra de la quinta dimensión. Así que nuestro trabajo como semillas estelares Arcturianas y Sanadores Planetarios es la entrega y servicio hacia esa conciencia unificada superior, hacia traer la energía del nuevo y siguiente estadio evolutivo del ser humano y todo el poder de su sistema inmunitario al momento presente. 








Fuentes:

sábado, 18 de diciembre de 2021

LAS PRESAS: FRAGMENTACIONES DEVASTADORAS DE LOS RÍOS

Redactado y publicado por David Arbizu


Desde hace siglos, el hombre ha construido diques y embalses en los ríos para poder aprovechar su agua por diferentes motivos. De hecho, se han encontrado esbozos de presas y redes de canales que se considera que fueron planificados antes del año 2000 a. C. Actualmente las presas y reservorios de agua fluvial se planifican para el riego, la distribución de agua potable a zonas habitadas, la distribución de agua para uso industrial, controlar el cauce para evitar crecidas e inundaciones y también para generar energía al formar parte de centrales hidroeléctricas.

Desde el siglo pasado, algunos científicos, expertos medioambientales e ingenieros fluviales han centrado sus estudios en los cambios que causan sobre todo las grandes presas, ya que normalmente crean embalses que afectan áreas geográficas muy extensas y que no solo afectan al río sino también a toda la superficie que queda inundada. Además, la presa tiene una influencia y provoca unos cambios medioambientales que se extienden tanto aguas arriba como aguas abajo, desde los límites superiores del embalse hasta lo que se puede considerar la cuenca hidrográfica del río a partir de la presa, incluyendo la desembocadura e incluso la costa y el mar.

Estos grandes diques y reservorios son verdaderos bloqueos y fragmentaciones, y una línea de flujo de agua que pierde toda su salud y vitalidad conforme va recibiendo cortes, agresiones y modificaciones. Estos bloqueos del flujo de agua de los ríos provocan muchos efectos ambientales sobre la fauna, el suelo y su compacidad y la vegetación, además de todos los efectos provenientes de su construcción, de su mantenimiento y toda la destrucción que se realiza al necesitar carreteras de acceso y, en el caso de una central hidroeléctrica, todo lo que suponen sus instalaciones, funcionamiento y sistemas de transporte de la electricidad. También hay que tener en cuenta que, al crear un embalse, posiblemente van a aumentar algunas actividades agrícolas, industriales y, en algunos casos, incluso turísticas alrededor de toda la zona. Así que el impacto es enorme sobre el flujo del agua, la estructura del río, sus riberas y la compacidad del terreno, la calidad del agua con altas posibilidades de contaminaciones por actividades antropogénicas, los efectos sobre todos los seres vivos, tanto terrestres como acuáticos, la salud de toda la vida vegetal, tanto de praderas como de bosques, la facilidad de que lleguen y prosperen especies invasoras y también todo lo que concierne al movimiento de nutrientes y sedimentos que el río transporta y va depositando durante su recorrido, facilitando la liberación y oxigenación en algunas zonas y la llegada y acumulación en otras, formando todo parte de la vida del río y todo el gran ecosistema que genera y mantiene en todo su cauce hasta su desembocadura, donde también tiene efectos importantes y necesarios sobre el mar u océano al que llegue.

Río Colorado (Arizona-Estados Unidos)

Presa de El Atazar (España) Fotografía de Carlos Delgado; CC-BY-SA

Las dos imágenes superiores muestran dos grandes presas. Cuando vemos estas grandes presas es fácil comprender lo que estoy explicando sobre sus efectos negativos, pero hay que tener en cuenta que cualquier bloqueo o fragmentación de un arroyo o río va a generar todos esos efectos en mayor o menor medida, y muchos ríos sufren bloqueos por paso de carreteras y cualquier forma artificial de encauzamiento de la corriente. Todo bloqueo o corte también representa una agresión a nivel energético, ya que muchos ríos coinciden con meridianos del planeta y estas modificaciones provocan cortes de energía y bloqueo de meridianos, así que son enormes los efectos tanto sobre la parte física como energética de hábitats y ecosistemas, y obviamente sobre toda la salud física y energética de la biosfera planetaria.

Ya he indicado que una de las preocupaciones principales es todo lo relacionado con los sedimentos, sedimentos que quedan frenados en la presa y que afectan a toda la estructura del río y, en especial, a su desembocadura. Estos sedimentos, estas partículas que se asientan en el embalse y no pueden seguir aguas abajo, son la causa de graves problemas que ahora se agravan todavía más con el cambio climático y la severidad extrema tanto de las tormentas como de las sequías junto al aumento del nivel del mar y del oleaje que está afectando a las costas. Muchas presas requieren cada vez más mantenimiento conforme los niveles del agua suben por encima de lo que pueden soportar y además acumulan toneladas de sedimentos que pueden provocar su derrumbamiento y mayores inundaciones. Al mismo tiempo, los sedimentos y nutrientes que llegan a las desembocaduras son vitales para la vida de los manglares y humedales, para equilibrar la erosión de las costas y playas, formando parte de todo el terreno costero que se relaciona con el impacto del oleaje y, por lo tanto, de la subida del nivel del mar que cada vez será más notable. Así que gracias a los sedimentos se mantienen los hábitats costeros, y tal como señala Robin Grossinger, científico del Instituto Estuario de San Francisco (California-Estados Unidos), la falta de sedimentos "es casi como quitar la comida de estos sistemas, quitar los nutrientes, los minerales y las vitaminas para que puedan crecer y adaptarse".

Río Snake (Estados Unidos)

Río Dove (Reino Unido)

Algunas presas son verdaderamente horribles, verdaderos monstruos de cemento y hormigón, como se ve en la imagen superior, que corresponde al río Snake de Estados Unidos. Y tal como he señalado, otras son menos impactante pero igual de negativas. La imagen inferior corresponde al río Dove, en Inglaterra, después de que se eliminaran pequeñas presas y bloqueos del flujo debido a canalizaciones y paso de caminos, y algunos de ellos se crearon y estaban afectando la salud del río desde el siglo XIII. 

Actualmente hay muchas organizaciones y programas enfocados en la eliminación de presas, tanto de gran tamaño como pequeñas y también con formatos como canalizaciones y cortes por pasos de carreteras u otras razones. Algunos de los programas y organizaciones más importantes son el Programa Dam Removal Europe o programa de eliminación de presas de Europa. Este programa es una cooperación de organizaciones a nivel europeo con la ambición de devolver la vida a nuestros ríos mediante la eliminación de presas antiguas y obsoletas. Se calcula que en Europa hay 1 millón doscientas mil barreras o bloqueos de ríos. Desde el inicio de este programa ya se han eliminado 4.984 represas en Francia, Suecia, Finlandia, España, Inglaterra y Gales, Escocia, Dinamarca, Portugal, Italia, Suiza, Estonia, Alemania. Otro programa que opera en colaboración con este es el programa Open Rivers, Ríos Abiertos, enfocado en un futuro de ríos de flujo libre con ecosistemas sanos, diversos y conectados en toda Europa, donde las comunidades que dependen de ellos los puedan disfrutar, valorar y proteger. Para hacer realidad esta visión, ambos programas ofrecen subvenciones para apoyar proyectos que conduzcan a la remoción de presas y la restauración del flujo, la función y la biodiversidad de los ríos.

Otra organización importante es American Rivers, de Estados Unidos. Desde esta organización se transmite que salvar ríos no es una opción sino una supervivencia, y que los ríos saludables y de flujo libre serán la mayor fortaleza de toda comunidad en una era de cambio climático. En Estados Unidos se ha aprobado una ley para facilitar legalmente la eliminación de las 90.000 presas que hay en el país, pero no incluye la financiación para eliminar muchas de ellas que, además, son presas hidroeléctricas propiedad del gobierno.


Estas cuatro imágenes muestran presas y bloqueos de ríos en diversas partes. La imagen superior izquierda es del río Deva, ubicado en el Parque Nacional de los Picos de Europa, en Asturias, España. Este obstáculo era muy perjudicial al ser muy difícil de superar por peces como salmones, que migran por ese río para desovar aguas arriba, limitando la existencia de estos peces en muchas partes del río. Su eliminación también implica el paso de otras especies como anguilas, lubinas y truchas.
La imagen superior derecha corresponde al Delta del río Danubio, y sirve para hacer referencia a la importancia de los deltas de los ríos y también a toda la destrucción que ha hecho sobre ellos el ser humano para aprovechar la riqueza que representa la llegada de los ríos a los mares u océanos. El río Danubio es el más largo de Europa, con un recorrido de 3.734 kilómetros y atravesando varios países para desembocar en el mar Negro, en Rumanía. El delta del Danubio se ha calificado como Reserva de la Biosfera, abarca un área de 4.000 kilómetros cuadrados, es el delta fluvial natural más grande de la Unión Europea y uno de los humedales más grandes que quedan en Europa. El Delta contiene una gran cantidad de hábitats diversos, desde bosques, estepas, cursos de agua y cañaverales, hasta dunas, lagunas, marismas y playas. La fauna y flora que vive en el Delta también es muy diversa con 300 especies de aves y más de 100 especies de peces, incluidas cuatro especies de esturiones. La mayoría de los cormoranes pigmeos del mundo y la mayoría de las poblaciones europeas de pelícanos blancos y pelícanos dálmatas viven allí. Hace poco que se han eliminado diez represas que eran terraplenes construidos con arcilla en una zona donde el delta ha formado una gran laguna.
La imagen inferior izquierda es del río Sopot, en Polonia. En este caso, la presa en sí no se eliminó debido a los permisos, las finanzas y la complejidad de reconstruir el puente en esa ubicación. En cambio, el obstáculo fue cubierto por una cantidad adecuada de rocas y grava. Esto elevó unos 70 cm el nivel del agua y fue suficiente para sumergir la barrera y permitir el paso de los peces. El equipo que realizó el trabajo también tuvo cuidado de comprender e imitar el flujo natural del río para garantizar el menor daño posible al ecosistema.
La imagen inferior derecha corresponde al río de la Hoz Seca, en el Parque Natural del Alto Tajo, en Guadalajara, España. Es un ejemplo que sirve para hacer referencia a los 17.000 kilómetros de ríos españoles que deberían "liberarse" para restaurar su biodiversidad, y cuya mayoría de bloqueos los forman pequeñas centrales hidroeléctricas ya obsoletas. Actualmente, en España se están eliminando muchas barreras de ríos y además se han suprimido muchos proyectos de nuevas presas. Por ejemplo, solo en el Río Ebro se han eliminado más de 40 proyectos de presas, aunque se van a acabar de construir 5 que ya están en marcha.

Creo que queda claro todo el daño que genera cualquier impacto sobre los ríos y cualquier flujo de agua natural. Actualmente muchas represas se realizan para conseguir agua para los cultivos de regadío, especialmente en zonas donde aumenta la sequía, tal como sucede en España, pero también las previsiones a medio plazo son de una reducción importante de la disponibilidad de agua en muchos lugares, y esto va a afectar tanto a los derechos sobre el uso del agua como a la necesidad de realizar acciones para que la que haya sea asequible, potable y ayude a sostener la salud de los ríos. Son muchos los informes que demuestran que la eliminación de presas es la medida "más rápida, fácil y barata" para restaurar un río, y su eficacia se ha demostrado en presas de todo el mundo, ya que se ha constatado que el tiempo que transcurre entre la eliminación y la recuperación del río es muy corto. En muy poco tiempo, incluso solo en unas cuantas semanas, los ríos vuelven a ocupar todo el espacio que se les podía haber arrebatado, aumenta notablemente la calidad del agua, la salud y fuerza de los bosques se revigoriza, se multiplica el número de especies acuáticas y terrestres, tanto vegetales como animales, y vuelven a funcionar los servicios ecosistémicos que un río en buen estado ecológico proporciona.







lunes, 6 de diciembre de 2021

LA CORRIENTE CIRCUMPOLAR ANTÁRTICA

Redactado y publicado por David Arbizu


La corriente circumpolar antártica es una corriente poco conocida pero extremadamente importante, tanto para el equilibrio de toda la Antártida como del planeta. Esta es la única corriente que circunnavega el planeta, que hace un giro completo alrededor del eje de rotación, y separa el agua fría del sur, del océano Antártico, del agua subtropical y más caliente de las corrientes subtropicales. Es una corriente relativamente fría que fluye de oeste a este alrededor de la Antártida, y este sentido del giro compensa el movimiento de este a oeste de las corrientes que tiene al norte, en la zona subtropical.


La corriente circumpolar antártica conecta los océanos Atlántico, Pacífico e Índico y transporta agua intermedia y profunda entre estos tres océanos, por lo tanto es una parte indispensable del Cinturón Transportador Oceánico o Corriente Termohalina.

En el momento de escribir este artículo, a finales del mes de noviembre de 2021, esta corriente ha sido noticia porque se ha detectado un aceleramiento y también se ha comprobado que su principal impulso no son los potentes vientos del oeste de la Antártida, sino el gradiente o diferencia de temperaturas entre las aguas cálidas que llegan desde los océanos Atlántico, Pacífico e Índico y las frías de la Antártida.

Se calcula que la corriente circumpolar antártica se formó hace unos 30 millones de años, cuando la Antártida y Sudamérica finalmente se separaron para formar el Estrecho de Drake, algo que hizo que la Antártida quedara aislada de las aguas más cálidas, se enfriara y se generara una reducción del dióxido de carbono, y todo ello provocó la formación de los glaciares sobre el continente, que anteriormente estaba cubierto de bosques. Entonces se formó esta corriente debido a las diferencias de temperatura entre las aguas, junto con la fuerza de los vientos, el movimiento de rotación de la Tierra y la gravedad, y el efecto Coriolis, que es una fuerza aparente de aceleración y, en el caso del hemisferio sur, de giro hacia la izquierda que afecta a todo tipo de corriente.



La corriente circumpolar antártica tiene gran importancia a nivel global. En las dos imágenes superiores vemos toda su interacción y también separación que realiza con otras corrientes, excepto del Ártico, y cómo delimita las corrientes de la Antártida. También se observa su relación directa con la Corriente Termohalina o Cinturón Transportador Oceánico, del cual forma parte de forma indispensable, como un verdadero motor impulsor situado en el sur. La corriente circumpolar antártica y todas sus propiedades interaccionan principalmente con la corriente del Atlántico que desciende desde la zona de Groenlandia e Islandia después de que a esa altura se hundan las aguas cálidas de la Corriente del Golfo. Entonces, la fuerza de la corriente circumpolar antártica reparte y envía hacia el norte, tanto en el Índico como en el Pacífico, y también en el Atlántico, aguas relativamente más frías y profundas para impulsar otras corrientes y liberar calor a la atmósfera o absorber calor de la atmósfera, sosteniendo patrones climáticos que permiten las diferencias de temperaturas, la formación de nubes y precipitaciones y todos los sistemas que forman la biosfera y permiten que la Tierra tenga estas características únicas para sostener su enorme fuerza de vida y biodiversidad. Por lo tanto, tal como definen algunos expertos, la corriente circumpolar antártica es una parte importante de la red mundial del transporte oceánico como redistribuidor del calor alrededor de la Tierra.


En la imagen superior se observa el Ártico. Aquí también se hubiera formado una corriente circumpolar, pero los continentes y zonas terrestres no lo han permitido. Por eso los patrones climáticos de los polos de la Tierra son tan distintos, y el Cinturón Transportador Oceánico tiene las características que tiene, favoreciendo que muchas zonas del hemisferio norte no se enfríen más de lo que podrían enfriarse. Se sabe perfectamente que esto es lo que mantiene a los países escandinavos con temperaturas más suaves de las que podrían llegar a tener, y que, por ejemplo, los fiordos no estén congelados. Por supuesto que todo esto lo digo considerando una situación equilibrada en el planeta, pero todo el calentamiento global provocado por el ser humano está desestructurando todos los sistemas. La imagen del Ártico también expresa cómo está cambiando el océano Ártico y está adquiriendo más las características del Atlántico al no sostener su fuerza para separar las aguas, especialmente debido al deshielo y a todo el debilitamiento de la corriente jet stream, del vórtice polar y corrientes internas tan importantes como la del Giro de Beaufort y la Deriva Transpolar. Si aumentan los cambios y debilitamientos de estas corrientes podría llegar a haber una liberación más excesiva de la que ya hay ahora de agua dulce y fría, principalmente en el Atlántico, y esto podría causar graves problemas sobre la Circulación Termohalina y corrientes como la Corriente del Golfo, que ya están muy debilitadas. En un caso extremo se podría detener la Circulación Termohalina y dirigirnos hacia una glaciación.

Vuelvo a centrarme en la corriente circumpolar antártica. Algo que también realiza la corriente circumpolar antártica es almacenar calor y carbono de la atmósfera, y en este momento los científicos todavía no saben si su aceleración va a provocar alguna emisión que pudiera impulsar la concentración de gases de efecto invernadero y el agravamiento de patrones climáticos a nivel planetario. En cualquier caso, cualquier cambio desequilibrante va a afectar a todas las corrientes oceánicas y a todo el Cinturón Transportador Oceánico, y también va a afectar la fuerza que pueda alcanzar el deshielo en la Antártida.

Tampoco se sabe el comportamiento que podría tener la aceleración respecto a los icebergs, porque una de las funciones de esta corriente es mantenerlos en el océano Antártico, pero cambios de velocidad podrían también generar impulsos para que entraran en zonas del sur de los otros océanos, con todo el peligro para las corrientes, para los patrones atmosféricos y para las formas de vida que no puedan adaptarse a enfriamientos súbitos de sus ecosistemas acuáticos. Si observamos el Ártico de nuevo, el hecho de que no haya una circulación circumpolar es lo que provoca que a veces los icebergs puedan descender hasta latitudes muy bajas respecto a su zona de formación.

Por lo tanto, lo importante es que se puedan mantener todos estos sistemas que forman parte del funcionamiento de la biosfera, que están conectados con los patrones planetarios de Gaia y su sistema del bucle de retroalimentación, y obviamente que el ser humano conozca cada vez más todas las características de este funcionamiento espléndido de nuestro planeta, y tenga bien integrado que todo el desequilibrio que está causando va a provocar los cambios climáticos que ya estamos viendo, con la crisis planetaria y la sexta extinción masiva, porque todo está relacionado, todo y todos somos una unidad con el planeta y su fuerza de vida.




martes, 30 de noviembre de 2021

IMPACTOS DE LA MINERÍA Y DE LOS SISTEMAS DE PRODUCCIÓN DE ELECTRICIDAD

 Redactado y publicado por David Arbizu



Existen diversos tipos de minería según los procesos que se utilizan para extraer los diversos materiales. Con el paso del tiempo ha habido grandes avances tecnológicos para llevar a cabo las extracciones, alcanzando puntos de difícil acceso o de gran profundidad y buscando también obtener el máximo de rentabilidad. Actualmente, en un mundo donde la tecnología está dominando nuestras vidas y nuestras decisiones, tanto a nivel individual como a nivel de micro y macroeconomía, algunos materiales, muchos de ellos descubiertos recientemente, se vuelven absolutamente imprescindibles para la materialización de los avances tecnológicos, y entonces hay una verdadera explosión de demanda a nivel global que acelera los proyectos mineros, la búsqueda de nuevos yacimientos y los métodos de explotación. Al mismo tiempo, sigue habiendo otro tipo de minería, normalmente ilegal y de pequeña estructura, en busca de oro y otros materiales considerados desde siempre de gran valor. En todos los casos, la destrucción del suelo, de ecosistemas, de hábitats imprescindibles para muchas especies y la mortal contaminación que se genera son impresionantes, así como la generación de residuos de una toxicidad muy elevada que en muchos casos acaban devastando enormes zonas naturales debido a accidentes y fugas o incluso liberaciones conscientemente provocadas. Al mismo tiempo, el abuso sobre comunidades y zonas urbanizadas que viven cerca de las minas, así como la explotación de la mano de obra, que en ocasiones llega a situaciones de completa esclavitud, demuestra todo lo que conlleva la actividad minera en nuestro planeta, se mire el continente que se mire y sea quien sea el responsable de cada explotación.

Una de las actividades mineras actuales más importantes es la dedicada a la explotación del litio. Al litio se le ha llamado el oro blanco, y su demanda está directamente relacionada con el desarrollo y aumento de la producción de baterías para teléfonos móviles, ordenadores portátiles, vehículos eléctricos, turbinas eólicas, placas solares y muchos dispositivos que requieran disponer de energía almacenada en baterías. Con toda la focalización actual, más o menos aparente, en la reducción de emisión de gases de efecto invernadero por la quema de combustibles fósiles, parece que el precio de toda esta minería de muchos materiales necesarios para las nuevas tecnologías justifica toda la destrucción y devastación que provocan las minas, todo ello sin tener en cuenta que todavía no hay tecnología apropiada para el reciclaje de las enormes cantidades de materiales que empezarán a acumularse conforme se gasten las baterías, se estropeen las turbinas eólicas, las placas solares y otros dispositivos; de hecho el problema del reciclaje ya está siendo extremadamente grave conforme se multiplica la acumulación de materiales y el ser humano prefiere seguir destruyendo y extrayendo que invertir en tecnologías de reciclaje, ya que le resulta más económico destruir. Así que hay toda una mentira y falsedad en ese mensaje de solución verde y sostenible para ahora pasar a vehículos eléctricos, pero se ha conseguido una reacción del mercado y una demanda beneficiosa que a no muy largo plazo, y si no cambia la mentalidad y la conciencia, nos conducirá a un nuevo impulso de la crisis medioambiental.


El litio nos muestra el ejemplo de dos tipos de extracción minera: por un lado se puede conseguir extrayéndolo de rocas subterráneas, donde se encuentra mezclado con otros minerales, algo que se realiza en las minas de Australia, a las que corresponde la imagen superior, y por otro extrayéndolo de salmueras y lagos salinos, donde se perfora y bombea el agua salada hasta la superficie y allí se deja evaporar hasta que queda una masa sólida de litio. Pero en ambos tipos de extracción hay procesos posteriores que provocan contaminaciones y utilización de productos químicos para obtener litio puro. Además, en el caso de los lagos se degeneran todos los ecosistemas, se destruyen los acuíferos que desembocan en los lagos y se provoca un aumento de situaciones graves de sequía y falta de agua potable, en parte porque el agua se evapora y también porque se utiliza en los procesos de obtención del litio. Todo esto afecta a las comunidades que dependen de esos espacios acuáticos naturales, sobre los que se ha desarrollado toda una biodiversidad dependiente del acceso y la pureza del agua.

Cada vez hay más yacimientos de litio. Aunque hace años que destacan los de Bolivia, Chile, Argentina y Australia, son importantes otros yacimientos más recientes de Perú, México, Estados Unidos, Portugal, España y Alemania. La rapidez con la que avanzan los desarrollos tecnológicos y científicos provoca que los grandes inversores y empresas quieran acelerar al máximo las explotaciones para aprovechar la demanda actual, ya que en cualquier momento puede surgir otra tecnología que se base en la utilización de otros materiales y se pierdan las expectativas de negocio y riqueza. Todo esto, ya sea hablando del litio o de cualquier otro material de gran demanda actual, conlleva mayores inversiones que acaban resultando en grandes destrucciones, contaminaciones, abusos y aceleración de la crisis planetaria.


Las grandes empresas mineras operan en todo el planeta, sea cual sea su país de origen, y en muchos casos invierten en países más pobres que sucumben a ofertas de crecimiento o inversiones que son necesarias, o simplemente tienen gobiernos corruptos fáciles de comprar. Por desgracias, en el continente africano podemos encontrar muchos ejemplos de estas situaciones y estrategias para extraer materiales valiosos causan gran destrucción y contaminación. Un ejemplo lo encontramos en la mina de cobalto y cobre en el Congo, a la cual corresponde la imagen superior, gestionada por empresas chinas. Todo este tipo de minería, que algunos denominan minería verde, está alertando a muchas organizaciones y se están publicando estudios alertando de sus impactos tanto sociales como ambientales. Según un informe del Atlas de Justicia Ambiental, que está coordinado por el Instituto de Ciencias y Tecnologías Ambientales de la Universidad Autónoma de Barcelona junto con la organización MiningWatch de Canadá y las comunidades afectadas de nueve países americanos, la industria minera mundial se ha posicionado rápidamente como la solución a la crisis climática, con empresas y países compitiendo por proporcionar los 3.000 millones de toneladas de metales y minerales que, según algunas estimaciones, se necesitarán en los próximos 30 años para impulsar la transición energética. El informe advierte que una transición energética que dependa en gran medida de la extracción de nuevos materiales “reforzará las injusticias y la insostenibilidad que han agravado la crisis climática en la que nos encontramos a nivel mundial”.



Estas dos imágenes son para mostrar ejemplos de la destrucción que provoca la minería, así como de la terrible explotación de mano de obra que está habiendo especialmente en países africanos, considerada una verdadera esclavitud donde no se valora la vida humana. La imagen superior corresponde a la Amazonia, y la inferior a la República Democrática del Congo, y todas ellas representan aspectos tremendamente negativos que en realidad se encuentran en cada actividad minera de cualquier país, solo que en países con más presión popular y también por parte de organizaciones hay más cuidado en dar una imagen de protección del medio ambiente y de que todo posible peligro de contaminación está controlado.

En relación directa con las actividades mineras, y compartiendo efectos negativos incluso mucho más peligrosos, el ser humano sigue insistiendo en la utilización de la energía nuclear. Ya hace años que se está invirtiendo y haciendo publicidad sobre los avances que van a representar los reactores modulares pequeños, presentados como más seguros y asequibles, pero no hay que olvidar que no dejan de ser reactores donde hay una fisión nuclear y van a generarse residuos radiactivos y químicos de alta peligrosidad.

Reactor Tokamak de Corea del Sur

Reactor Tokamak de China

Junto a esta necesidad de avanzar en la utilización de la energía nuclear, mientras todas las centrales nucleares del mundo envejecen y se van deteriorando y volviéndose más peligrosas y más caras de mantener, ya son muchos los países involucrados en el desarrollo y construcción de reactores llamados Tokamak, que algunas personas también llaman reactor solar artificial. Un reactor Tokamak, como los que se observan en las imágenes superiores, es una cámara toroidal con bobinas magnéticas diseñada para reproducir las reacciones físicas que ocurren en el Sol y otras estrellas, además de emplear el potencial de la fusión nuclear como fuente de energía ilimitada y limpia, que no produce desechos radiactivos. Estos reactores no utilizan combustibles no renovables como el uranio, sino que utilizan potentes imanes para controlar y estabilizar el plasma, formado por partículas de hidrógeno, que se quema a millones de grados para que se desbloquee y libere su energía. Es justamente alcanzar esas temperaturas de millones de grados lo que en parte ralentiza el desarrollo de esta tecnología, ya que, entre otros componentes, se debe equilibrar cuidadosamente el calor extremo, el gas y los campos magnéticos.

Así que nos encontramos ante el desarrollo de una nueva tecnología que utiliza un isótopo del hidrógeno, que los científicos consideran de suministro ilimitado en la Tierra, y una fusión que no es una reacción en cadena, como sucede con la fisión nuclear. Según sus defensores, esto significa que la actividad puede controlarse y detenerse simplemente retirando el combustible, pero ya se sabe que la reacción produce helio, considerado no nocivo, y también produce tritio radiactivo, como el que contiene el agua que se quiere verter al océano desde Fukushima. Además, el plasma provoca que las paredes del reactor se vuelvan radiactivas, o sea que ya todo empieza a descuadrar con el mensaje de limpieza y solución futura que se está dando.

Lo que sí que es seguro es que tanto el desarrollo y construcción de reactores nucleares pequeños como de estos reactores Tokamak no se van a completar adecuadamente a corto plazo, incluso se considera que podrán ser útiles a partir de la próxima década. Así que ya solo por esta razón no son una solución al problema de la generación de energía que afronta la humanidad. Por otro lado, las pruebas realizadas en los reactores Tokamak han necesitado de una energía externa para ponerse en marcha, y el consumo de esa energía siempre ha sido mayor que el de la energía producida, así que mientras que no haya un verdadero avance tecnológico se está gastando más energía de la que se produce. Y todo ello desvía la atención y las inversiones que se podrían enfocar en buscar energías realmente limpias, quizás desarrollando nuevas formas de placas solares y de herramientas para aprovechar la fuerza del viento y de las olas que no fueran tan destructivas para la biosfera y los seres vivos como lo siguen siendo ahora. Y lo más importante, fabricadas con materiales 100% reciclables que permitieran el detenimiento de esta minería desarrollada por el ser humano que está destruyendo y contaminando todo el planeta.





Fuentes:

domingo, 14 de noviembre de 2021

LOS ARRECIFES DE CORAL

Redactado y publicado por David Arbizu



En el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos para el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), publicado el 9 de agosto, se nombraban nueve zonas o sistemas cuya degradación implica alcanzar puntos de inflexión muy graves y con consecuencias locales y planetarias, y uno de los sistemas señalados son los arrecifes de coral.


Los corales son animales coloniales, son pólipos pequeños que se agrupan formando estructuras biológicas rígidas al absorber el carbonato de calcio del agua de mar, generando un exoesqueleto producto de la calcificación. Los corales necesitan la capa externa dura para sobrevivir. Aunque pueden atrapar plancton y pequeños peces ayudados por las células urticantes de sus tentáculos, la mayoría de los corales obtienen la mayor parte de sus nutrientes de las algas unicelulares fotosintéticas, denominadas zooxantelas, que viven dentro del tejido del coral y son las que provocan que sean tan brillantes y coloridos. El tipo de coral más conocido, que forma arrecifes, necesita luz solar y crece en agua clara y poco profunda, normalmente a profundidades menores de 60 metros.

Las estructuras que crean los corales son la base de los ecosistemas marinos, se considera que sostienen más del 25% de la vida marina. Muchas plantas, crustáceos y peces pequeños viven permanentemente en los arrecifes de coral, pero también peces más grandes los utilizan para cazar e incluso para criar. Por ejemplo, en la Gran Barrera de Coral de Australia, que ocupa 348.000 kilómetros cuadrados y 2.300 kilómetros de longitud, se encuentran más de 1.500 especies de peces, unas 400 especies de corales y 4.000 especies de moluscos, además de una gran diversidad de esponjas, anémonas, gusanos marinos, crustáceos y otras especies. Y junto a todas estas especies marinas, la supervivencia y formas de vida de unas 240 especies de aves están directamente relacionadas con este gran arrecife.

Los arrecifes de coral forman parte de los ecosistemas costeros, de la zona de transición entre el mar y la tierra. Junto a los arrecifes de coral, y conforme se acerca la costa, se pueden encontrar manglares y praderas submarinas. Los arrecifes de coral forman una barrera que protege del fuerte oleaje a las praderas submarinas y a los manglares y, al mismo tiempo, los manglares y praderas protegen a los arrecifes contra la sedimentación. Ahora todas estas estructuras están siendo muy valoradas al reconocerlas como guardianes de la biodiversidad y sumideros de carbono muy eficientes. Incluso hay estimaciones que señalan que los arrecifes de coral aportan el 80% del oxígeno del mundo. También son importantes sistemas de protección y defensa de las costas tanto por la posible llegada de marejadas ciclónicas, generadas por la llegada de tormentas o huracanes, como por la subida del nivel del mar e incluso la formación de tsunamis provocados por movimientos sísmicos o actividades volcánicas submarinas.

Los arrecifes de coral más conocidos son la Gran Barrera de Coral, considerada la especie viviente más grande de la Tierra con sus 2.300 kilómetros de longitud y compuesta por miles de arrecifes. El segundo arrecife coralino más grande del mundo es el Arrecife Mesoamericano, que se encuentra en el mar Caribe y se extiende por más de 700 km, desde zonas costeras de México, pasando por Belice, Guatemala y Honduras. El tercer arrecife de coral más grande del mundo es el Arrecife de Florida, en Estados Unidos. Otro lugar importante es la isla Lord Howe, situada en el sur del océano Pacífico, donde hay una cadena de montes submarinos cubiertos por más de 80 especies distintas de coral. También es importante el Arrecife Shiraho en Japón, formado con corales de color azul, donde se encuentran más de 70 tipos de corales, y se considera la formación coralina más antigua y grande del hemisferio norte. Otros arrecifes muy valiosos del planeta se encuentran en Hawái, el mar Rojo, la Polinesia Francesa y las islas Bermudas.

Si hablamos de los arrecifes de coral como zona de gran biodiversidad y acumulación de formas de vida, también es lógico que sean muy importantes para el ser humano como fuente de alimentación, además de toda su función protectora de las costas. Por desgracia, el cambio climático provocado por el ser humano provoca la acidificación de los océanos y, consecuentemente, la reducción de iones de carbonato en el agua y una mayor dificultad de realizar el proceso de calcificación que necesitan los corales. También el aumento constante de la temperatura del agua, con eventos de olas de calor marinas, provoca que los corales se estresen y expulsen a las algas. Este fenómeno se conoce como blanqueamiento del coral y, una vez que sucede, si las temperaturas del agua siguen elevadas, el coral no permite que regresen las algas y acaba muriendo y provocando desequilibrios y dificultades de supervivencia para muchos otros seres.


Blanqueamiento de corales


Un estudio actual señala que el 98% de los corales de la Gran Barrera de Coral de Australia han sufrido alguna vez algún episodio de blanqueamiento, principalmente debido a las olas de calor. Por desgracia, cuando esto sucede es muy difícil que haya una buena recuperación.  También existen informes del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente que indican que, en un escenario de altas emisiones, para el año 2034 habrá un 100% de posibilidades de que se den condiciones de blanqueamiento severas anuales y que, en el mejor de los casos, si se redujeran las emisiones y teniendo en cuenta las dificultades de recuperación de los corales, los episodios de blanqueamiento severo comenzarían 11 años después, aproximadamente en el año 2045. Estos datos señalan la década de los años 40 como el punto donde se llegará a una gran mortandad de los corales.

Otros estudios indican que los arrecifes de coral alcanzarán un punto de inflexión en el año 2054, que a partir de ese momento los corales dejarán de crecer por completo y sus estructuras de carbonato de calcio comenzarán a disolverse en el océano, porque en lugar de absorber el carbonato de calcio, los esqueletos lo liberarán de vuelta al agua y esto provocará la disolución del coral. De hecho, esto ya ha empezado a suceder en una parte del Arrecife de Florida, en Estados Unidos.

Así que todo lo que implica la crisis climática, donde encontramos la huella del Antropoceno con las contaminaciones, la construcción y urbanización de las costas, la pesca de arrastre y, en este caso, también el exterminio del coral para el comercio internacional de la joyería realizada con coral, está provocando la extinción de los corales y sus arrecifes a nivel mundial. Y recordando lo que expliqué el día que trabajamos sobre la contaminación acústica y lumínica, a todos estos efectos perjudiciales provocados por el ser humano podemos añadir la contaminación acústica, que provoca trastornos de comportamiento en los seres que habitan los arrecifes, que impide que el sonido que hacen esos ecosistemas pueda ser escuchado por especies que necesitan llegar hasta ellos y cuya presencia o paso también beneficia la estabilidad del arrecife. También quiero mencionar el turismo, con todas las excursiones en embarcaciones que contaminan los ecosistemas, con toda la enorme cantidad de buzos invadiendo zonas donde el ser humano no debería estar nunca, bajo ninguna circunstancia, porque su mera presencia es signo de trastorno, desequilibrio, abuso y degradación.

Cultivo de coral submarino

En varias zonas del planeta con arrecifes de coral hace bastantes años que se empezaron a poner en marcha proyectos para preservar los corales e intentar cultivarlos para impulsar la recuperación de zonas devastadas. Estos cultivos normalmente se basan en cortar trozos de coral existentes para cultivarlos en un vivero submarino. Después de un tiempo, cuando alcanza un tamaño adecuado, los corales cultivados se unen a zonas que antes estaban vivas para que pueda haber una nueva colonización.

Otros cultivos se están realizando en cautividad, especialmente para satisfacer la demanda de los aficionados a la acuariofilia. Algunas instalaciones trabajan con agua marina y se iluminan con medios naturales, y lo que se hace es utilizar esquejes de coral colocándolos en bases artificiales donde empiezan a crecer. Por otro lado, existen instalaciones cerradas de cría de coral en países como Alemania, Estados Unidos, Holanda e Inglaterra, donde el agua y la sal no son naturales, ni tampoco la iluminación, y su producción se vende a empresas y particulares.

Unidades de siembra de corales

Existe una organización llamada Secore dedicada a la restauración de los arrecifes de coral utilizando sus procesos naturales reproductivos. Sus equipos recolectan huevos y esperma que algunas especies de coral liberan de forma natural para fertilizarlos y criarlos después en tanques, hasta que se convierten en larvas y nadan libremente. A continuación las larvas se disponen en “unidades de siembra”, que son una imitación realizada en impresión de 3D de los lugares del arrecife donde se fijarían de forma natural. Cuando las larvas están asentadas, las unidades de siembra son trasplantadas a las zonas del arrecife que requieren restauración.

Esperemos que todas las acciones sirvan para que el ser humano comprenda la importancia de estos ecosistemas marinos imprescindibles. Finalizo con las palabras del profesor Kent Carpenter, de la universidad Old Dominion de Virginia, Estados Unidos, que es director de un censo mundial de especies marinas y declaró: “Se podría decir que el colapso completo del ecosistema marino sería una se las consecuencias de la pérdida de los corales”, y añadió: “Con la pérdida de los corales se verá un efecto en cascada tremendo para toda la vida en los océanos”.







Fuentes: